Elisabeth Vreede fue una matemática, astrónoma y antropósofa holandesa, una de las colaboradoras más cercanas de Rudolf Steiner y que formó parte del Vorstand original en Dornach.

«Vreede» se traduce del holandés como «Paz».

Elisabeth Vreede nació en Holanda, en La Haya, el 16 de julio de 1879. Era una persona sensible y, más adelante en su vida, jugó un papel importante en la vida de la Antroposofía.

Elisabeth Vreede entró en contacto con la Teosofía en su hogar mientras crecía. Se interesó desde muy temprana edad por el cielo estrellado y, mientras aprendía francés, leyó las obras de Camille Flammarion, un astrónomo y autor francés. Debido a su formación científica, abordó la reencarnación desde el punto de vista del método científico, escribiendo: «Es solo mediante el método científico que podemos progresar en la búsqueda de la verdad. La fe religiosa no debe sustituir al análisis imparcial. Debemos estar constantemente en guardia contra las ilusiones”.

En la Universidad de Leyden, estudió matemáticas, astronomía, sánscrito y filosofía (especialmente Hegel). También participó activamente en la vida estudiantil, fundó un club náutico y fue miembro del consejo del sindicato de estudiantes.

Tras recibir su diploma en 1906, impartió clases de matemáticas en una escuela superior para niñas hasta 1910. Luego vivió en Berlín, trabajó en su tesis y trabajó como secretaria para Rudolf Steiner. En abril de 1914, se trasladó a Dornach para ayudar en la construcción del primer Goetheanum y a menudo se la encontraba allí tallando madera.

Su primer encuentro con Rudolf Steiner tuvo lugar en el Congreso Teosófico de Londres en 1903. Vreede fue directora de las secciones de matemáticas y astronomía en el Goetheanum de Dornach desde 1926 hasta 1935. En su calidad de directora de la Sección Matemática-Astronómica escribió una carta mensual, entonces disponible por suscripción, sobre astronomía moderna y astrología clásica a la luz de la ciencia espiritual. Las cartas incluían explicaciones de los fundamentos de la astronomía y debates sobre la astrología en el mundo moderno, con referencia a temas como la precesión de los equinoccios, los cometas, los eclipses solares y lunares, y el significado de las festividades cristianas como la Pascua y Pentecostés. Las cartas traducidas al inglés se publicaron en 2007 con el título Astronomía y ciencia espiritual.

Rudolf Steiner dijo de ella: «esta individualidad no quiere ser reconocida…» Elisabeth Knottenbelt en sus memorias describe declaraciones sobre ella: que «ella encarnó demasiado pronto» con el fin de servir a Rudolf Steiner: «para esta tarea [el trabajo con Rudolf Steiner] había asumido el sacrificio de una encarnación prematura. Quien, por el bien de una misión espiritual, viene de esta manera a la Tierra demasiado pronto debe renunciar a mucho. En gran medida, uno deja atrás su círculo kármico de seres humanos en el mundo espiritual. Su vida era, pues, bastante solitaria, sólo unas pocas personas se agrupaban a su alrededor sin ninguna conexión real”.

Olive Whicher, asistente personal y colega de George Kaufmann, recuerda: “La Dra. Vreede solía decir medio en broma que creía que llevaba ‘Tarnkappe’ -un gorro invisible. Creo que es cierto y, además, que el gorro invisible se extiende a temas bastante centrales en el gran impulso de Rudolf Steiner. Sin duda, a medida que pasen las décadas y las almas que albergan esos impulsos vitales se vuelvan de nuevo hacia la Tierra, el gorro invisible se irá desgastando y se volverá transparente”.

“Fría” fue la única palabra que resumió a Elisabeth Vreede para Ernesto Genoni, el pionero fundador de la biodinámica en Australia, cuando la conoció en 1920. Otros relatos de primera mano confirman su impresión.

Olive Whicher recordó que Elisabeth Vreede “tenía la expresión solemne y decidida, incluso severa, del pensador”.

Rudolf Steiner la vio en conexión con la corriente platónica y le había indicado que ella había encarnado antes de lo planeado para encontrarse con él en la Tierra.

Se dice que Rudolf Steiner dijo que la Dr. Vreede entendía su trabajo más profundamente que nadie.

Después de la guerra, Rudolf Steiner desarrolló su idea del triple orden social y ella también tenía un intenso interés en esta iniciativa y trabajo. Fue la primera en traer esta idea de un triple orden social a Inglaterra.

Elisabeth Vreede se había mudado a Dornach en 1913, viviendo inicialmente con la escultora inglesa Edith Maryon.

Elisabeth Vreede experimentó la tragedia de la guerra de primera mano. Se mudó a Berlín (en 1916-1917) para apoyar a los prisioneros de guerra británicos. Había vivido en el mismo bloque de apartamentos que Marie y Rudolf Steiner en Motzstrasse. En esta labor filantrópica trabajó con la Dra. Elisabeth Rotten, cuáquera, activista por la paz y cofundadora de la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad. Sus sentimientos hacia Berlín eran ambivalentes: “mi peculiar estado de ánimo con respecto a Berlín, la más maravillosa y la más terrible de todas las ciudades”.

En 1918, la Dra. Vreede comenzó a construir la biblioteca y el archivo del Goetheanum. Con sus propios medios, compró las costosas transcripciones de las conferencias tan pronto como las transcribió a máquina a partir de notas. En 1920 se mudó a Arlesheim, Suiza, donde construyó una pequeña casa para ella misma. Era la segunda casa para la que Steiner había dado el modelo en 1919.

George Kaufmann Adams escribió que: “El modelo de esta casa había sido construido por Edith Maryon con la ayuda del Dr. Steiner… La ‘Casa Vreede’ en la colina de Arlesheim, mirando directamente al Goetheanum, se hizo conocida por su hospitalidad entre innumerables amigos”.

Elisabeth Vreede asistió al Curso de Agricultura de Rudolf Steiner en Koberwitz y fue miembro del “Círculo Experimental de Agricultores y Jardineros Antroposóficos”, encargado de probar y hacer progresar las “sugerencias” de Rudolf Steiner para el desarrollo de una agricultura holística/espiritual. Ayudó a los agricultores a desarrollar y comprender los aspectos astronómicos de su trabajo.

Vreede dio una conferencia para la “Sesión Agrícola” en Dornach en enero de 1926, llamada “La Importancia de la Astronomía para la Agricultura”.

En la Conferencia de Navidad de 1924, Steiner la nombró directora de la Sección Matemática-Astronómica de la Escuela de Ciencias Espirituales de la recientemente restablecida Sociedad Antroposófica, y perteneció a la junta directiva de la Sociedad Antroposófica general de 1925 a 1935. Rudolf Steiner había declarado: “Fräulein Vreede es una de las personas que mejor entiende mis conferencias”.

Lili Kolisko, pionera de la biodinámica, escribió: “Elisabeth Vreede, PhD, era miembro del Consejo Ejecutivo, a cuya opinión se le daba muy poco –casi se podría decir, absolutamente ningún– valor. Esto a pesar de que el Dr. Steiner la presentó en la Conferencia de Navidad [1923] con las siguientes palabras: “Asimismo, un miembro de mucho tiempo es la persona a la que me refiero ahora y que ha demostrado, hasta el último detalle, ser la colaboradora más leal aquí y con la que realmente también se puede estar de acuerdo hasta el último detalle: Fraulein Dra. Lili Vreede”

Rudolf Steiner afirmó: “siempre se busca su consejo cuando necesitamos saber algo en el ámbito matemático-astronómico… Deseo que este trabajo continúe en el futuro bajo la dirección de Fraulein Dra. Vreede”.

En 1935 se produjo la separación de la Sociedad Antroposófica y fue expulsada del consejo ejecutivo y excluida, junto con su amiga de muchos años y co-miembro, la Dra. Ita Wegman, de la junta directiva. También fue apartada del observatorio y de los archivos que ella misma ayudó a reunir.

Expulsada a los cincuenta y cinco años, Elisabeth Vreede continuó viajando, a menudo a Holanda e Inglaterra, también a Italia, Grecia, Palestina, Egipto, Irlanda y Turquía. Su último viaje a Alemania fue en 1938 para ayudar a los miembros judíos de la Sociedad Antroposófica. Meses antes de su muerte, pronunció el panegírico en el funeral de su compañera de purga, Ita Wegman (1876-1943).

Los últimos años de su vida fueron más solitarios. La guerra la alejó de sus amigos en el extranjero. La muerte de Ita Wegman a principios de marzo de 1943 fue un gran shock para ella. He aquí una cita de una carta escrita por ella antes de su destitución del consejo ejecutivo:

“El Ser de la Antroposofía – yo misma siempre lo he sentido como un ser espiritual recién creado por el Dr. Steiner, como si fuera el primer Ser jerárquico que los hombres han engendrado, bastante joven y todavía subdesarrollado, como es el caso de un niño – un Ser que ahora debe comenzar a desarrollarse más a través de nuestro trabajo común como una ‘comunidad de conocimiento’, y con la cooperación de su creador del mundo espiritual. Precisamente por esta razón me resulta tan doloroso cuando se lanzan ataques continuamente contra una parte de los miembros activos, para excluirlos del trabajo, de crear juntos el Ser de la Antroposofía”.

El 3 de enero de 1926, la Dra. Vreede dio una conferencia, que fue publicada por primera vez en el Vol. 6, Núms. 42 a 46, titulada El mundo de las estrellas y el destino humano. En ella abordó el uso apropiado de la Astrología en nuestro tiempo:

“Ahora comprenderán para qué tenemos un horóscopo, y que no está ahí en primera instancia para nuestro propio beneficio. Comprenderán que cuando un horóscopo se hace para la satisfacción de una persona, siempre hay una cierta cantidad de egoísmo conectado con él; ¡porque no lo posee para este propósito! Y si toman los pasajes en nuestra literatura donde el Dr. Steiner habla sobre Astrología (hay pasajes en muchos de los ciclos y conferencias) encontrarán cómo enfatiza una y otra vez que la Astrología debe ser algo social, que no presta atención al individuo, sino que tiene fines sociales. En una verdadera Astrología, solo se considera lo que es universalmente humano y no la satisfacción del egoísmo del ser humano. “Si se considera egoístamente, se deshace la acción de Micael, por la que otros seres deberían ser salvados de precipitarse en el abismo.

Cuando el Dr. Steiner preguntaba por la posición de las estrellas en el momento del nacimiento, siempre se refería a niños que carecían de una u otra de las fuerzas que acabamos de describir. Entonces era posible saber cuál de estas fuerzas no estaba presente en el sentido correcto; así, se podía deducir qué faltaba a esa alma humana antes del nacimiento. Y entonces, en determinadas circunstancias, podría ser posible encontrar una cura. Aquí vemos cómo se aleja el asunto de lo egoísta y se lo lleva a lo social, cuando esos niños anormales pueden de esta manera encontrar una cura, que de otra manera tal vez no sería posible. Pero en aquellos niños en los que no se introdujeron ciertas fuerzas al nacer, estas influencias siguen presentes. …Vemos, pues, cómo se puede utilizar la Astrología cuando se la mantiene en el sentido de Micael, y no en el sentido en que se practica tan a menudo hoy en día”.

En 1928 invitó a Willi Sucher a Dornach y colaboró con él en la elaboración de los asterogramas de la muerte de personalidades históricas, que formaban parte de su importante investigación histórica y que continuó desarrollando a finales de los años 30 y 40, haciendo los gráficos y la investigación terapéutica de niños con necesidades especiales en Inglaterra y Escocia.

En el aniversario, en 1943, de la muerte de Rudolf Steiner, habló ante el círculo de amigos y compañeros de trabajo de la clínica Ita Wegman. Querían conmemorar no solo a Rudolf Steiner, sino a muchos otros que eran antropósofos destacados pero que ya no eran conocidos por la mayoría. Habló con devoción sobre Edith Maryon, que también murió en 1924, y Alice Sauerwein. Retrató al conde Keyserlingk y Louis Werbeck, Caroline von Heydebrand y Eugen Kolisko.

A principios de mayo de 1943, habló una vez más con motivo del 400 aniversario de la muerte de Copérnico. En la conferencia se observó que sólo con un esfuerzo excepcional podía mantenerse en pie. Apenas unos días después, el 6 de mayo, tuvo que guardar cama. Hasta entonces, nunca había estado enferma ni dependido de nadie. Gracias a la devota atención de la señora Schunemann, fue tratada en su casa hasta su fallecimiento el 31 de agosto de 1943 en Ascona.

“Las estrellas nos traen las huellas de las Obras de los Dioses que conducen a través de los Seres de las jerarquías a las fronteras de la Divinidad misma.” ~ Elisabeth Vreede

(Fuente: gracias a Hazel Archer-Ginsberg. Agosto de 2023)

Elizabeth Vreede -«Rito Inverso»