Conferencia no revisada, Albrighton Hall, 5 de enero de 1953

de Willi Sucher

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En la esfera de Saturno encontraríamos allí toda una especie de esencia anímica, como por ejemplo la memoria, que concebimos como ideas. La esencia Divina en Júpiter son ideas vivas, mientras que en la esfera de Marte la esencia Divina ya está aún más condensada, y en la Tierra finalmente se convierte en materia.

Júpiter se refiere al futuro. Esta intención o esfuerzo futuro vive en la atmósfera y ya está presente ahora. Si miramos a Júpiter con un telescopio, lo único que vemos es algo que parece una nube, ya que no vemos ninguna superficie. Podemos ver que Júpiter está preparando el futuro, si imaginamos lo que dijimos antes sobre Saturno y el Sol como dos polos, y entre estos dos polos están los planetas Júpiter, Marte, Tierra/Luna, Mercurio y Venus. En medio de estos dos polos, se describió la actividad y evolución de la Tierra, incluyendo su mitad Marte y su mitad Mercurio Oculto; por lo tanto, si trazamos un círculo desde Saturno hasta el Sol y desde allí, lleváramos el círculo alrededor de los tres planetas de la evolución de la Tierra, ascendiendo hasta Júpiter (lo que indica la futura Quinta Gran Ronda de la Evolución) y regresando a Venus Oculto, también vemos que en el futuro lejano la Gran Ronda será la evolución de Venus. Este es el futuro tal como lo describe Rudolf Steiner como la evolución de los futuros Júpiter y Venus.

Mientras estamos en la Tierra, vemos las estrellas fijas del Zodíaco. Júpiter, que también hace bucles, necesita 12 años para recorrer el Zodíaco. Las estrellas reales, las formas de sus movimientos rítmicos, nunca podremos verlas. Anoche os mostré la estrella de cinco puntas de Venus con sus movimientos retrógrados, que nunca se ven físicamente cuando se mira al cielo nocturno. Podríamos seguir al planeta Júpiter en su movimiento, y sólo entonces encontraríamos al Júpiter real. Podemos ver en sus movimientos los 12 gestos poderosos que se realizan en cada una de las constelaciones (uno cada año), como 12 puertas. La esfera de Júpiter está habitada por seres que se preparan para el futuro. Júpiter es esa poderosa divinidad del pensamiento filosófico, un mundo vivo de ideas. Es el mundo de ideas vivas de Platón. Júpiter es Zeus y está relacionado con el uso del cerebro. Palas Atenea nació del cerebro de Zeus. Júpiter está asociado con el pensamiento activo y sufre con el pensamiento pasivo e intelectual. Nuestros pensamientos serán la sustancia del futuro Júpiter: la Nueva Jerusalén. Júpiter construye el Nuevo Júpiter a través de las 12 puertas del Zodíaco. Es una esfera cósmica muy elevada, la esfera de los Espíritus de la Sabiduría, los Kyriotetes.

Durante los Tres Años del Ministerio de Cristo, los gestos de Júpiter comienzan después de un bucle en Aries, un bucle en Tauro y un bucle en Géminis:

¿Qué podemos ver en este movimiento? En Aries encontraríamos todas las fuerzas espirituales que forman la cabeza. Todo lo que está conectado con la laringe está conectado con Tauro, y el desarrollo posterior se produce en Géminis con el equilibrio: derecha/izquierda, arriba/abajo, etc. Las fuerzas de Júpiter descienden a través del pensamiento, convirtiéndose en la Palabra creativa, luego en actos en Géminis.

Señalé que hay que pasar por tres puertas. En Acuario encontramos la región del Bautismo. La primera imagen de fuego en Acuario se encuentra en el sexto ciclo del Antiguo Saturno, relacionada con nuestra circulación sanguínea. Una vez nuestros antepasados ​​eran como flores. Imagina que hay una planta con una flor; que alguna vez fue «humano», pero no tan endurecido.

Con Júpiter en Aries reconoceríamos a los Kyriotetes, en el que Cristo es la cabeza: «He aquí el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo». Cordero de Dios significa el Espíritu de los Kyriotetes. El plan básico se estableció en la evolución del Antiguo Saturno, y luego, en la evolución del Antiguo Sol, los Kyriotetes trajeron la Vida.

En la Pascua del 30 d.C. Júpiter entró en Tauro, El Verbo creador, y fue un paso más hacia la encarnación. Encontrarás este pasaje en el Evangelio de San Marcos: «No predicó como los escribas; Habló como alguien con autoridad». Cristo habla con el poder de la autoridad, o Espíritus de la Forma, —los Exusiai-Elohim— habla la Palabra creadora. Después tuvo lugar la consagración de los 12 Apóstoles.

En el año 32 DC. se produjo la Alimentación de los 5.000 y los 4.000, para los de la 4ª Época que se prepararían para la 5ª Época. Es el siguiente paso hacia la encarnación. Cristo no es sólo el maestro, entra en la comunidad. En Géminis, el cabeza de los Kyriotetes entra ahora en los últimos pasos de la encarnación. La dinámica de Géminis se transforma en Hermandad. Era posible que Cristo no estuviera sólo en Su cuerpo. Rudolf Steiner dijo que Cristo podía entrar en otros seres (ver el capítulo séptimo de las conferencias de San Juan y el Quinto Evangelio).

Marte es el planeta de la agresión y la conciencia concreta, y es el último paso hacia el mundo material. Es la muerte de la esencia Divina, muriendo en la materia. Empuja la esencia cósmica demasiado profundamente hacia la Tierra, cuando está en conjunción con la Tierra, o la aleja demasiado cuando está en oposición a la Tierra.

El viaje de Marte comienza con un bucle en Capricornio, que se podría decir que es una intención de cerrar la Tierra contra las fuerzas cósmicas. Los espíritus que están conectados con Marte tienden a la densificación.

Durante los 40 días posteriores al Bautismo, Cristo Jesús estuvo en el desierto. Cuarenta es un número cósmico: Moisés estuvo 40 años en el desierto; los 40 días después de la Resurrección. Después Marte ingreso en Géminis durante el Gólgota y posteriormente. Cristo tenía la capacidad de aparecer en el Cuerpo resucitado. Júpiter estaba en la posición más alta del cielo. Marte se había convertido en siervo de Cristo, y con su capacidad de condensación le da a Cristo la posibilidad de ser visto en el Cuerpo de Resurrección. Cristo no dependía de las estrellas, pero tomó estos poderes, incluso transformándolos, y los llevó al nuevo cosmos.

Traducido por Gracia Muñoz en noviembre de 2023

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