Por Adriana Koulias

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Queridos amigos,

Nuevamente ofrezco mi comprensión de los acontecimientos actuales vistos a través de la ciencia espiritual tal como puedo impartir en esta etapa.

Hoy vivimos en tiempos tumultuosos que sólo podemos entender uniendo a Magos y Pastor para encontrar esta comprensión de manera imaginativa e inspiradora.

Aquí hay un ejercicio de magos/pastor. El caso judicial de la CIJ.

Este es un acontecimiento importante, Israel versus Palestina, dos bandos opuestos, dos pensamientos e ideas opuestos. ¿Cómo pueden entenderse y reconciliarse en el alma?

Para hacer esto no podemos simplemente mirar los eventos físicos, aunque esto es importante, también debemos encontrar el complemento espiritual de ellos.

Todos los acontecimientos en la tierra, todos los hechos están relacionados con los pensamientos. En nuestras almas nuestros pensamientos viven una existencia oscura, por ejemplo, podemos tener dos pensamientos opuestos viviendo uno al lado del otro, pero no se matan entre sí. Estas pueden ser dos caras de un problema, podemos unirlas para crear un nuevo pensamiento -una solución creativa que se convierte en acción, o pueden ser tan incompatibles que se pelean en nuestra alma – un pensamiento vence al otro – un pensamiento ahrimánico vence a uno luciférico, por ejemplo, y esto puede conducir a un acto destructivo.

Mientras somos inconscientes de esto, somos guiados por seres elementales a sentirnos de una manera o de otra. No somos libres.

Tenemos que volvernos conscientes de lo que realmente «vive» en nuestros pensamientos: debemos convertirnos en magos y entrar en el alma para ver, como he estado hablando últimamente, el contenido vivo del pensamiento cuya presencia es anunciada por la imagen residual.

Para hacer esto tenemos que atravesar la Puerta de la Muerte porque pensar es un proceso de muerte. Cuando percibimos a los seres elementales del pensamiento en la voluntad, se produce una resurrección del verdadero espíritu viviente del pensamiento y esto nos permite experimentar «quién» piensa: es nuestro ángel.

Ahriman intenta impedir que veamos a nuestro ángel porque entonces podemos seguir viviendo en pensamientos abstractos negando el espíritu.

‘Y es Ahriman quien se asegura de que no veamos a la entidad mental tomando la forma que te he descrito. Él no quiere que lo veamos. Quiere impedirlo. La mejor manera de llegar a ese punto es por el camino de la meditación, por supuesto, y esto siempre hace que a Ahriman le resulte fácil anular, por así decirlo, lo que queremos lograr, siempre y cuando nos aferremos a los prejuicios del mundo físico. Y realmente tengo que decir que la gente no tiene idea de cuánto se aferran a los prejuicios con respecto al mundo físico. No pueden imaginar que existe otro mundo con leyes diferentes a las del mundo físico. No me es posible hoy discutir todos los prejuicios que llevamos con nosotros cuando llegamos al umbral del mundo espiritual, pero permítanme presentarles un prejuicio muy importante, uno de naturaleza bastante sutil.’

 Rudolf Steiner.

Por ejemplo, miremos a Israel y Palestina, están luchando en el mundo en guerras y ahora en los tribunales. Si simplemente tomamos lo que vive en pensamientos oscuros con respecto a esta batalla, estos pensamientos lucharán en nuestras propias almas. Mientras somos inconscientes de estos pensamientos, todos los acontecimientos del mundo son vistos a través de prejuicios, propaganda, paradigmas, todos los cuales son seres que han entrado en nosotros. Estamos repletos de estos seres de prejuicios, que buscan nuestras predisposiciones y sentimientos egoístas, incluso nuestros instintos más profundos de odio hacia los demás y amor a la nación. Ellos pelean y luchan en nosotros por la supremacía, y si no somos conscientes de estos seres, que son luciféricos o ahrimánicos, nos mueven como péndulos. Sentimos como si nos tiraran de un lado a otro, esto es una señal de que somos objetos de juego de ambos seres, por lo que no somos objetivos, coloreamos lo que vemos con estas simpatías y antipatías y no podemos ir más allá para conocer la superior comprensión moral a menos que entremos en el mundo espiritual, pero el Guardián Inferior que se encuentra en el umbral del mundo de los elementos que bloquean el camino nos impide hacerlo; esta es una visión de nuestro karma. Recordamos el espíritu y con él viene el conocimiento de nuestro propio karma.

Nuestro ángel no nos permitirá traer nuestro equipaje kármico al mundo espiritual para colorear todo lo que vemos y somos ‘expulsados’ del mundo espiritual hasta que neutralicemos los colores que son los seres, llevándoles lo contrario. Esto lo hacemos para estar seguros en el mundo espiritual, porque cuando entramos allí hay una interpenetración continua de las más diversas opiniones, pensamientos y sentimientos que son hechos y están constantemente luchando.

‘En el mundo astral, las ideas más completamente opuestas pueden compenetrarse entre sí. Hay que decir que cuando se discuten cosas en el mundo físico prevalece la contradicción, pero en el mundo astral lo que prevalece de inmediato es el conflicto. Porque, como ser del mundo astral, uno no puede guardar sus pensamientos para sí mismo, se convierten inmediatamente en hechos; los objetos están ahí al mismo tiempo… En el plano astral cada opinión debe convertirse en acción. Allí uno no lucha; uno deja que las opiniones peleen, y la que es más fructífera expulsa a la otra del campo. El mundo astral es, por decirlo así, mucho más peligroso, y mucho de lo que se dice sobre su peligro está relacionado con lo que acabamos de decir. Así, allí todo se convierte en hecho y todas las opiniones deben luchar entre sí, no discutir ni debatir.’ Rudolf Steiner

Entonces, debemos imaginar que lo que vemos hoy como pro Israel o pro Palestina son dos ideas que se pelean en los mundos espirituales y que solo vemos un reflejo sombrío en el mundo. Si vamos a entrar en ese mundo espiritual para comprender qué es más elevado que estas dos opiniones, el ángel Guardián inferior, nuestro ángel, nos dice que debemos neutralizar a nuestros propios seres elementales, es decir, ennoblecerlos convocando los sentimientos opuestos. Si sentimos una profunda simpatía por Palestina, debemos complementarla con una profunda simpatía por Israel y viceversa. Si podemos dejar atrás los ‘colores del alma’, nuestro ángel nos encontrará lo suficientemente objetivos como para entrar en el mundo espiritual, en la medida de lo posible.

En otras palabras, salimos del cuerpo etérico y entramos en el mundo etérico.

Aquí nuestra observación del pensamiento tiene que llegar a su fin, tenemos que apoderarnos de la voluntad, porque es la voluntad la que puede dominar este mundo:

‘Estos pensamientos nos han llevado de aquí para allá, pero ahora tenemos que tomar el control de estos pensamientos y crear algo a partir de ellos. Hemos atravesado la Puerta de la Muerte y ahora tenemos que atravesar la Puerta de los Elementos.’

Y

‘Este estado tiene que llegar a su fin. Lo hace cuando atravesamos la Puerta de los Elementos. Entonces obtenemos el control de todo y somos capaces de crear una línea particular de pensamiento de manera bastante deliberada. Entonces nuestra voluntad está viva dentro de toda la vida del pensamiento. Este es nuevamente un momento tremendamente importante. Incluso he hablado de ello exotéricamente en mis conferencias públicas. El segundo objetivo se alcanza identificándonos con nuestro propio destino. Esto nos permitirá llevar la voluntad al mundo del pensamiento vivo.’

 Rudolf Steiner.

Hemos estado en el reino de la semblanza y el ser – Pensamiento y Ser y ahora tenemos que crear con estos seres meditativamente y al hacerlo desarrollamos una fuerte voluntad. Aprendemos a ‘montar’ el león. Lucifer intenta detener esta experiencia; para ellos, simplemente podemos permanecer en el reino de las simpatías y antipatías y de la falta de libertad.

Si hemos entrado por la Puerta de la Muerte en esta etapa cuando salimos como Pastores al mundo etérico, podemos distinguir nuestros pensamientos creados de los seres elementales que son los pensamientos creados por seres astrales o ángeles. En otras palabras, no confundimos nuestro cuerpo etérico con el mundo etérico. Si nos saltamos esto, podemos caer en la ilusión luciférica, volvernos súper egoístas y participar en magia ‘gris’ o incluso magia negra usando lo que sabemos de los seres de pensamiento y trayéndolo al mundo para controlar a los demás.

«El problema es que ya no somos capaces de decir qué es lo que nos pertenece y qué es parte del mundo exterior. Llegamos a conocer entidades espirituales, espíritus elementales. Es posible llegar a conocer un mundo espiritual bastante extenso sin tener que ir a través de la Puerta de la Muerte, pero en general estas son entidades espirituales cuya función es mantener la circulación humana y la acción del corazón humano. Tales entidades, por supuesto, siempre están presentes en el mundo espiritual, elemental, que nos rodea. Estos son espíritus cuya esfera de la vida es el aire, el calor que fluye a nuestro alrededor y también la luz.’

Rudolf Steiner.

El pastor tiene que atravesar su propio cuerpo etérico, su propio cuadro kármico, para entrar en el mundo etérico propiamente dicho.

A esto se le llama entrar por la Puerta del Sol para experimentar la cognición moral como Pastores. Ahora comenzamos a experimentar las fuerzas morales que viven detrás de todos los acontecimientos en el mundo físico y en la naturaleza misma, y nos damos cuenta de que la moralidad más elevada del cosmos tiene una fuente en el ser de Cristo.

Las fuerzas morales, son seres elementales superiores de los que hemos hablado la última vez, son superiores a los seres de los elementos inferiores, pertenecen a los éteres superiores y nos llevan a Cristo que es el Sol espiritual que brilla en el mundo etérico. Ante Cristo se encuentra en este momento Micael, quien es el juez, nuestro Guardián Superior.

Él está por encima del mundo, por encima de los pensamientos que luchan en el mundo etérico a través de opiniones, simpatías y antipatías; éste es el clima de ese mundo y ahora nosotros también podemos ver los relámpagos y los truenos tal como son, porque nos hemos elevado por encima de ellos en nuestras almas y en el mundo etérico.

La verdad que Michael ahora nos da es esta: lo duradero siempre prevalece sobre lo transitorio. Lo que es duradero es moral.

Michael nos dice, absorban todo lo que ven y oigan, permitan que se apague y sigan los pensamientos hasta su fuente, vean sus colores. Siempre prevalecerá el pensamiento más duradero, estos son pensamientos Cósmicos – y debemos encontrar el ser de quien prevalecen los pensamientos – de Micael o de Ahriman:

‘En virtud de su relación con el mundo, lo mismo funcionará de manera creativa y saludable; procedente de otro, resultará fatal y destructivo.’ Rudolf Steiner.

Incluso sin clarividencia se puede sentir, sentir en el alma, si el alma no tiene prejuicios sobre lo duradero o lo destructivo.

¿Qué es duradero y creativo? El pensamiento que es progresivo y encaja con la sabia guía del mundo espiritual que es Cristo de quien el Amor Cósmico entra al mundo.

Los tribunales humanos son un intento de permitir que los pensamientos luchen y las leyes son los parámetros para tal batalla en un tribunal.

El tribunal de Arturo, por ejemplo, era un lugar al que la gente podía acudir para exponer sus quejas y resolver disputas. Los Caballeros de la Mesa Redonda son una imagen de las leyes morales del mundo espiritual tal como se reflejan en el mundo físico. Doce jurados y un juez son una expresión física simbólica de Cristo entre los 12 Bodhisattvas.

La batalla en el mundo etérico es muy a menudo entre pensamientos que son luciféricos y ahrimánicos y pensamientos que son similares a los de Micael/Cristo. Juzgar cuál es cuál requiere sabiduría.

Cristo se sienta en el centro de estos pensamientos luciféricos y ahrimánicos, los mantiene equidistantes y nos muestra lo que vive más alto: la moralidad. Lo que es luciférico y ahrimánico nunca es duradero.

El Pastor ve ahora la manifestación astral de Cristo en todo su resplandor en el mundo etérico. Al principio lo veíamos como el juez silencioso de estos pensamientos Ahrimánicos y Luciféricos, pero ahora nos muestra cómo él es la más Alta manifestación de amor.

Mientras el mundo sigue luchando en guerras, ajeno a la mirada amonestadora del Guardián, nosotros en el umbral del Mundo Astral experimentamos al Guardián Superior del Umbral como Cristo – a la vez la expresión de las leyes morales más elevadas del universo y en su expresión el mayor amor cósmico. Así se ve cuán lejos está el mundo de la legalidad y cuán lejos estamos nosotros en el alma del amor.

Aquí experimentamos al Dragón, siendo el dragón Ahriman y Lucifer juntos, Ahriman es el dios de las leyes físicas, Lucifer el dios de las leyes personales egoístas. Ambos nos susurran al oído cosas relacionadas con nuestros instintos e impulsos más básicos. La tragedia fundamental del alma moderna es que, cuando se encuentra ante Cristo en toda Su magnificencia, surgen los instintos más bajos para negarlo y profanar la experiencia.

¡Este es el dragón y es bueno que lo veamos!

Este dragón está conectado a las fuerzas del sol. Estas son las fuerzas que viven en nuestro metabolismo.

‘Si no percibimos al dragón en la Puerta del Sol, el dragón nos devorará y seremos uno con él en el mundo espiritual.’

Rudolf Steiner.

La seducción del dragón si es inconsciente es que ingresamos al mundo astral con leyes mundanas y/o ingresamos al mundo físico trayendo consigo leyes espirituales ilícitamente.

Las guerras son el resultado de tales engaños inconscientes en nuestro tiempo.

Si somos conscientes de esta criatura quimérica, nos encontramos en el portal del sol y Cristo ahora nos muestra la verdad. Lo que vive por encima de la opinión. Ahora podemos elegir quedarnos o regresar al mundo de los sentidos llevando con nosotros la verdad para ayudar a otros a verla por sí mismos. Esto es buena voluntad. La voluntad de volver a hacer el bien es decir acercar el ideal, las leyes morales a la ‘idea’, las leyes físicas a los demás.

Para un antropósofo que se ha unido a Magos y Pastores, la ley moral es lo que perdura a través de Cristo. Ninguna política, ninguna semántica, ningún argumento o propaganda pueden desviarlo de un lado o de otro de la verdad que perdura, la moralidad superior que vive por encima de todo.

¿Qué perdura? El espíritu. No puede haber paz en la tierra hasta que los seres humanos encuentren su camino individual hacia el espíritu para conocer la verdad que vive por encima de la opinión y no se puede encontrar el espíritu a menos que suceda en la tierra. ¡Por eso la vida es tan importante! Y es por eso que matar es un ataque terrible al espíritu, especialmente matar a niños. Porque los soldados que luchan en la batalla son iguales. Los niños no pueden luchar para salvarse.

Los niños son el futuro de la evolución de la Tierra.

Matar es inmoral. La vida perdura. Porque sólo en la vida el hombre puede encontrar a Cristo.

El rey Salomón fue sabio: cuando trajeron ante él a dos mujeres que decían ser madres de un niño, les dijo que cortaría al niño por la mitad y le daría a cada madre su porción.

Una madre dijo: ‘Mátenlo’.

La otra madre dijo: ‘¡No! ¡Déjale quedarse con él, pero no lo mates!

Así encontró el rey Salomón a la verdadera madre. La sabiduría partiría en dos al niño, pero el amor reconoce quién busca la vida y lo que vive siempre perdura.

En una persona que ha unido a magos y pastores que ha ascendido al mundo etérico y se ha presentado imaginativamente ante Cristo, el espíritu vive y lo que perdura siempre prevalecerá de manera objetiva. Una persona así puede entonces unirse con otra que sea igual y experimentarán un sentido común de la verdad. Así es como pueden unirse platónicos y aristotélicos si han unido a Magos y a Pastores. Nunca estarán en desacuerdo porque ambos pueden ver la verdad con sus propios ojos.

Jesús dijo: Dejad a los niños, y no les impidáis venir a mí; porque de ellos es el reino de los cielos.» – Mateo 19:14

Con amor y el más profundo respeto,

Namaste,

Adri.

https://corpuslux.blogspot.com/2015/02/ga157-los-destinos-individuales-y_54.html

Traducido por Gracia Muñoz.