Del libro: Hablando a las estrellas: Una introducción a la Astrosofía

Por Jonathan Hilton

English versión (pág. 67)                                               

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Antes de pasar a Júpiter y Saturno, sólo señalaré que Rudolf Steiner dio conferencias y escribió muchísimo sobre la relación del ser humano con el reino estelar y los Seres jerárquicos en relación con las estrellas y los planetas.

En la página web astrosophy.com, y al final de este libro, hay una bibliografía de referencias de todas sus obras donde se centra en estos aspectos del ser humano y la evolución de la Tierra, así como una selección de numerosas citas de sus conferencias. Ciertamente se puede profundizar mucho en la comprensión de la astrosofía profundizando en algunas de las obras de Steiner y, por supuesto, Willi Sucher ha escrito varios libros y artículos. Todos ellos están disponibles para su descarga gratuita en el sitio web. Por tanto, hay abundante material para futuras investigaciones.

Este curso introductorio es sólo para comenzar a darnos peldaños para entrar en la profundidad del significado que se encuentra en estos reinos estelares, de modo que cuando vamos a interpretar un mapa, nos demos cuenta de la gran cantidad de sabiduría que subyace en los movimientos de estos planetas y su llegada a una constelación particular en el momento del nacimiento.

Si pasamos ahora a Júpiter y Saturno, nos alejamos en el sistema solar hacia lo que se denominan los planetas exteriores. La órbita de Júpiter es de 12 años, por lo que existe este maravilloso movimiento de Júpiter que tarda aproximadamente un año en moverse a través de una constelación del zodiaco. Aquí se expresa una maravillosa relación y armonía entre el Sol y Júpiter y a medida que profundicemos en el conocimiento de Júpiter quizás podamos comprender un poco más sobre esta armonía con el Sol. Nuestro Sol atraviesa un signo del zodíaco en un mes durante los doce meses de un año, y Júpiter atraviesa un signo del zodíaco en un año en su ciclo de doce años.

Saturno, el más alejado de los planetas clásicos, tarda para ser exactos 29,458 años en una órbita sideral alrededor de la Tierra. Así que aquellos que estén un poco familiarizados con la astrología o con los ritmos biográficos, podrán reconocer en estos 29 años y medio lo que se llama el retorno de Saturno, es decir, el punto en la biografía humana en el que Saturno regresa después de casi 30 años al lugar dónde estaba cuando uno nació.

Esto tiene un significado que abordaremos en sesiones futuras, pero creo que tal vez todo el mundo haya tenido una experiencia alrededor de los 30 años con esta pregunta: “¿Qué estoy haciendo con mi vida?” ¿Estoy realmente viviendo lo que tenía intención de vivir? ¿Estoy cumpliendo las intenciones que pensé que quería lograr? Esto está profundamente relacionado con la esfera de Saturno. Hablaremos de ello un poco más adelante.

Pero ahora llegamos al ritmo de estos dos planetas y su forma en los cielos. Júpiter hace cierto ritmo con su ciclo de 12 años y Saturno con su ciclo mucho más largo, pero la forma importante que encontramos con Júpiter y Saturno, también refleja la relación de estos dos, se podría decir, grandes seres que nos envuelven. en el cosmos. La forma que Júpiter y Saturno crean juntos es otra forma geométrica viviente. Se unen entre sí aproximadamente cada 20 años en un lugar determinado del zodíaco. Durante 60 años se encuentran en tres lugares diferentes, una vez cada 20 años, y crean en estas conjunciones un triángulo en los cielos.

Puedes ver esto en la imagen de abajo. Después de 60 años, la conjunción regresa nuevamente al primer punto y luego regresa nuevamente al segundo punto, de modo que estos ciclos de conjunción de 20 años, que crean este triángulo, también conservan su forma. La forma gira alrededor de 8 a 10 grados hacia adelante con cada ciclo de 60 años. Toda la forma triangular tarda 2500 años en realizar una gran rotación completa. Es genial, esto es genial.

El triángulo es un símbolo esotérico importante. De hecho, puedes verlo en el billete de un dólar estadounidense, en la cima de la pirámide. También se le llamaba «la estrella de Zoroastro», «zoro aster», que significa estrella dorada.

Este es el Triángulo Dorado o Estrella Dorada, y está profundamente relacionado con toda la influencia del gran iniciado Solar, Zaratustra, que es el fundador de la antiquísima época cultural persa, y quien desde entonces ha encarnado en diversas individualidades. Está profundamente conectado con lo que se describe en los Evangelios como la Estrella de Belén, pero profundizaremos en eso más adelante, cuando profundicemos en el significado de estas estrellas en relación con los acontecimientos de Cristo.

El profundo contexto histórico de la rotación de este triángulo dorado se expresa en su rotación de 2500 años, que en la tradición oriental se llama Kalachakra. Un Kalachakra son 2500 años. Un Yuga son dos rotaciones a lo largo de 5000 años.

Kali, en la religión hindú, es El Guardián del Umbral. Se la describe como terrible y maravillosa, y está de pie sobre la forma prostática de Shiva, su esposo, sosteniendo una espada. Si miramos hacia atrás en la evolución, digamos que comenzó en el 3100 a.C., este fue el comienzo de lo que se llama Kali Yuga. que es la Edad Oscura. Esa Edad Oscura duró 5000 años y terminó en 1899 d.C. Entonces, si pensamos en el año 3100 a. C. como una especie de punto de partida para este Kalachakra y lo movemos a través de un ciclo de 2500 años, llegamos al 600 a. C., aproximadamente la época del nacimiento de Gautama Buda. Avanzamos otros 2.500 años y llegamos al final de Kali Yuga en 1899. Si luego avanzamos otros 2.500 años hacia el futuro, llegaremos al 4.400 d.C., que es la época del próximo Buda, el Buda Maitreya.

Así, aquí se puede vislumbrar el profundo significado de la rotación de este triángulo dorado. Willi Sucher, en sus investigaciones, ha rastreado este triángulo hasta el momento de la encarnación de Cristo en la Tierra. Ha descubierto que las fechas de esas tres grandes conjunciones también están relacionadas con tres grandes eventos dentro de esta encarnación, o más bien justo antes del comienzo de la vida de Jesús, durante Su vida, y poco después de la resurrección de Cristo, pero todos significativamente vinculados. al gran impulso de este Ser. También profundizaremos en eso mientras miramos estas esferas planetarias en relación con este evento cósmico en la Tierra en el punto de inflexión del tiempo en el próximo Capítulo.

Traducción revisada por Gracia Muñoz en septiembre de 2023